Egresado de la Escuela, Leiva se ha destacado en su carrera como periodista, productor y realizador audiovisual. Reconocido por su capacidad para fusionar el periodismo tradicional con las nuevas formas de comunicación digital, especialmente a través de su estilo directo y habilidad para conectar con nuevas audiencias. Pasó por ETER y conversó con los estudiantes de Producción audiovisual. 

Sobre sus días como estudiante de la escuela dijo: “Me recibí a los 21 años en ETER, soy de la primera camada de Producción. Me sirven hasta hoy la cantidad de herramientas aprendidas en ese momento. De tanto hacer, conocés nuevos lenguajes y formatos, la parte más tecnológica de cómo manejar un programa u otro. Eso es un capital que te lo llevas después a cualquier trabajo”. 

En relación con sus primeras experiencias laborales contó: “Mi primer laburo fue a los 21, iba solo por el viático, no cobraba. Después tuve una pasantía por ETER en un programa de Lalo Mir, para mí fue como que me digan de trabajar con Messi. Era muy creativo y un referente, fue como un doctorado. Todavía lo busco cuando necesito una opinión, siempre está mirando donde nadie mira, es un superpoder”. Luego, pasó por Radio Mitre, Vorterix y Filo News, donde estuvo como Director de contenidos y creó “Caja Negra”, ciclo de entrevistas íntimas conducido y producido por él. Esto lo consolidó entre audiencias de todas las edades. Actualmente desarrolla, por medio de Hispa, los ciclos “Colorama” y “El Buscador”.

Los alumnos tuvieron la oportunidad de pedir a Julio consejos. “Muchas veces uno termina cumpliendo el deseo de otro, porque no es tu programa, pero hay que poder buscar lugar para lo propio. Si no hay lugar para lo propio, no es ahí. Si no lo siento o no veo algo que me atraiga, no lo hago. Ese es mi norte, tiene que haber algo que me dé curiosidad, ganas de hacer, o me ponga nervioso”. Respecto a las ventajas de la tecnología destacó: “En su generación cualquiera con un teléfono puede hacer temblar al mundo. No esperen, hagan.  Antes alguien te tenía que abrir la puerta para poder jugar, hoy las herramientas están al alcance de la mano”. 

Hacia el final de su visita, el entrevistado concluyó: “Le recomendaría a un estudiante de producción que nunca pierda la curiosidad. Es un motor para un productor. Hay que entender que el rol de un productor es resolver problemas y que después viene la etapa de la creatividad”. Antes de irse, habló un poco de su relación con la Escuela. “ETER es como mi casa. Vengo casi todos los años, una cosa de volver a donde uno fue feliz, ¿no? Entonces vengo siempre, sobre todo como una forma de agradecimiento”.

* Por Lucas J. Sztabzyb (@lucaustro) estudiante de 1er año de Producción audiovisual.