Cuando Eduardo Aliverti habla frente a un micrófono, la realidad se convierte en radio. Entonces, al frente del aula donde está, en ETER -de donde es rector-, los alumnos escuchan. En medio de este clima, inició la charla frente a los estudiantes de Periodismo, que se enfocó en cómo hacer buenas entrevistas periodísticas, un género que Aliverti maneja con maestría.

Al comenzar el encuentro, el conductor del programa “Marca de Radio” detalló algunos trucos para acceder al entrevistado y los errores en los que se suele incurrir. Para él es esencial el respeto que se debe tener de acuerdo a las características del personaje a entrevistar en cuanto a la forma de llegarle eludiendo la “impunidad, el amateurismo e infantilismo” para abordar al entrevistado. Trajo al aula las palabras del libro Técnicas de la entrevista periodística, de Sibila Camps sobre las técnicas de aproximación al entrevistado: “La personalidad de la persona, las circunstancias que está viviendo, en qué contexto se desarrolla la entrevista y las pautas culturales que rigen a la comunidad o el sector al que pertenece esa persona”. Sobre esto, destacó que son cuestiones a las que el periodista debe atender.

Aliverti, que es locutor, hombre de radio, fue trece veces ganador del premio Martín Fierro por su labor periodística, sostuvo que es esencial para quienes están aprendiendo sobre el género, que empiecen a observar las entrevistas con “criterio profesionalizante”. Esto significa posar la mirada sobre el entrevistador, no sobre quien responde. Cómo formula las oraciones. “Si es realmente una entrevista o una charla. Si está inquiriendo o si está relajado como si estuviera tomando un café”. Al llegar a este punto, advirtió sobre la “necesaria distancia y un periodista tiene que interponer con el entrevistado”, en oposición al compinchismo, haciendo alusión a algunos colegas a los que a la hora de preguntar, solo les hace falta “el babero”. 

Sobre el final del encuentro, se abrió a la posibilidad de que los estudiantes hicieran sus preguntas. En este espacio surgieron dudas acerca de cómo arrancar una entrevista, qué preguntar a alguien que aparece muy seguido en los medios, entre otras sugerencias. Ante estas cuestiones, Aliverti afirmó que una buena primera interrogación es “la que dispara sorpresa en el entrevistado” y resaltó que la pregunta corta, preparada, y sin muletillas es la mejor manera de asegurar el comienzo. Respondiendo a otra de las dudas, para el periodista y locutor una forma de pensar preguntas originales a un habitué de las entrevistas, es “obrar por antítesis”, esto sería: no preguntarle absolutamente nada de lo que le suelen plantear. Según Aliverti, muchas veces la ausencia de originalidad se debe a la falta de información para hurgar en un tema. Frente a los estudiantes remató: “Cuanto menos sepas, menos se te va a ocurrir”.

* Por Iván Saposnic Eggers (@sapo_errante), estudiante de 1er año de Periodismo.